Estudiando el libro de Hechos de los Apóstoles, en el capítulo 13 encontramos la historia cuando la iglesia de Antioquía envía a Bernabé y a Saulo a su primer viaje misionero. Ellos, al llegar a la isla de Chipre, se encontraron con un personaje muy particular llamado Barjesús. Hechos 13:6 nos dice que éste hombre era «mago, falso profeta, judío».
La Biblia nos advierte en diferentes lugares respecto al surgimiento de falsos ministros, y nos brinda también algunas de sus características para que podamos identificarlos fácilmente.
En el capítulo 2 de la segunda carta del Apóstol Pedro, y en la carta de Judas encontramos una lista muy útil e interesante de esas características. Vemos que esto no es nada nuevo, por lo que es importante que estemos alertas. Vemos juntos la lista a continuación. Te animo a que la leas teniendo la Biblia a mano, para ir comparando cada ítem con el pasaje bíblico correspondiente:
Características de los falsos profetas según el Apóstol Pedro y Judas
2 Pedro, capítulo 2
- Introducirán encubiertamente herejías destructoras.
- Negarán al Señor.
- Atraen sobre ellos destrucción repentina.
- Muchos seguirán su libertinaje.
- Por ellos el evangelio será blasfemado.
- Guiados y motivados por la avaricia.
- Aduladores por interés.
- Andan en placeres en inmundicia
- Desprecian la autoridad.
- Son atrevidos y obstinados.
- Hablan mal de cosas que no entienden.
- Recibirán la recompensa de su injusticia.
- Viven de placeres día tras día.
- Equivalen a inmundicias y manchas para el cuerpo de Cristo.
- Ojos llenos de adulterio.
- Insaciables al pecar.
- Seducen las almas inconstantes.
- Corazón habituado a la codicia.
- Son hijos de maldición.
- Han dejado el camino recto.
- Aman las ganancias deshonestas.
- Están vacíos en sí mismos, no tienen nada para dar.
- Son seductores y aduladores.
- Llevan a los fieles al pecado.
- Prometen libertad siendo ellos esclavos.
Judas
- Están encubiertos en el cuerpo de Cristo.
- Predestinados a la condenación.
- Hombres impíos.
- Convierten en libertinaje la gracia de Dios.
- Niegan a Dios.
- Son soñadores.
- Manchan la carne (el cuerpo con pecado)
- Rechazan cualquier tipo de autoridad.
- Blasfeman a Dios.
- Se corrompen como animales.
- Son irracionales en su proceder.
- Han seguido el camino de Caín (falta de devoción y homicidio)
- Avaros (como Balaam).
- Rebeldes y soberbios (como Coré)
- Son manchas en el cuerpo de Cristo.
- Se preocupan por sí mimos (egoístas)
- Vacíos (nubes sin agua)
- Sin fruto (árboles otoñales)
- Inconstantes
- Dos veces muertos (en su espíritu y moral)
- Desarraigados (sin comunión)
- Errantes, solitarios (no se sujetan a nadie).
- Murmuradores.
- Quejumbrosos
- Andan según sus propios deseos.
- Aduladores por interés.
- Causan divisiones.
- No tienen al Espíritu Santo.
El poder sin amor tiene la capacidad de corromper a aquel que lo ejerce. Podemos confirmar esto con la historia del Rey Saúl, a quien Dios levantó desde la nada y lo puso por sobre todo, y en pocos años se ganó la desaprobación de Dios, quien tuvo que quitarlo del liderazgo.
La Biblia nos enseña claramente acerca de los falsos pastores. No sólo estar atentos a la aparición de estos en el Cuerpo de Cristo, ¡también tengo que estar atento a no convertirme en uno, ni siquiera en lo más mínimo!
Otros pasajes bíblicos que hablan sobre los falsos ministros son Ezequiel 34 y Mateo 7:15-20.